Este local surge en 2010 de una bús queda «por brindar un concepto más contemporáneo y actualizado de la cocina cordobesa», explica Juan Luis Santiago, cocinero y propietario de Garum 2.1, un local que busca crear experiencias a través de la cocina. La sorpresa y lo inesperado inundan toda una carta centrada en el producto local al tiempo que mantienen las recetas tradicionales de la tierra. Cuentan con varios platos con premios locales, nacionales e internacionales como el salmorejo, las manitas de cerdo crujientes, el pulpo con oreja y el churro de rabo de toro con chocolate. Sin embargo, otra de las mejores alternativas para disfrutar de su cocina es ponerse en manos del cocinero y la sala y dejarse llevar a través de sus sabores.